Carta de Renuncia....

La Verdad De Un Mito

Esto va dirigido a alumnos, ex alumnos, futuros alumnos, futuros ingresantes, a quien quiera y tenga el tiempo de leerlo.
No escribo esto en virtud de algún tipo de resentimiento – por llamarlo de alguna manera. Si no que lo hago porque me siento “defraudada” por el sistema que elegí para estudiar. No voy a negar que me tomo mi tiempo darme cuenta, pero lo hice. Igualmente no soy tan estúpida, si me quede todo este tiempo fue por mis amigas, (pequeño dato sobre mí, soy muy poco sociable) que fueron las únicas que hicieron de mis días en la universidad una experiencia única, hermosa, e irrepetible.

Gracias chicas!

A Diana, Andrea, Jessi, Jime, Meli & Hagy ( aunque algunas ya se fueron), de corazón espero que tengan muchos éxitos, porque ustedes no son mediocres y la suerte les queda chica.



La universidad se presupone es un lugar para la formación, integral, de una persona especifica, el alumno. A menos que yo tenga una visión completamente errónea al respecto.
Entonces que se supone que es una institución en donde los profesores te inclinan al fracaso, donde te dejan copiar descaradamente, en donde todo queda impune. Excepto para algunos pocos. ¿Es acaso eso una universidad? Mi respuesta a simple vista seria negativa, y quiero creer que la de aquellos que leen también.
Es una realidad, los alumnos eventualmente nos copiamos cuando realmente lo necesitamos. Pispiamos la hoja de nuestro compañero buscando una ayuda desesperada para poder empezar a responder. Preguntamos algún alma cercana el año de una encíclica, o cual es el mandamiento que dice tal o cual cosa. Esas son cosas que son normales, y les llegaría a decir que hasta es entendible que los profesores los dejen pasar.
Cosas muy distintas son que los mismos profesores ayuden a los alumnos a copiarse, que hagan ‘la vista gorda’ frente a determinados alumnos que lo hacen. Diferente es que se ensañen con algunas personas porque simplemente no quieren ir con el sistema de la universidad.

Ingrese con la creencia de que entraba en una de las universidades más prestigiosas y difíciles de la CABA. El ingreso no fue algo que me costo, ingrese con un 10 y en ese momento sentí que la universidad iba a ser un pasaje tranquilo y placentero. Hoy veo lo equivocada que estaba.
Hoy les puedo decir, que una universidad que se jacta de ser prestigiosa no permite bajo ningún concepto que sus alumnos se copien, es mas creo que no permite siquiera que piensen en copiarse. Ese tipo de universidad es una que es conocida por el popular de la gente, uno no tendría que estar explicando su ubicación geográfica o argumentando que de hecho existe y que uno cursa en ella (algo que tengo que hacer con frecuencia).

Descarando el Mito

Afróntennoslo, todos nos hemos copiado alguna vez. En mayor o menor medida. Pero todos rozamos el pecaminoso camino de ser copiados – dejarse copiar es tan malo como hacerlo – o simplemente copiarnos.
Ahora existe una diferencia entre copiar porque es una medida desesperada y hacer del hecho de copiar o preparar hojas una forma de vida.
No es una mentira lo que escuchan. Hay alumnos que no solo se copian si no que se auto proveen de hojas que contienen diferentes temas que son sabidos se van a tomar.
Mi pregunta frente a esto es, ¿Dónde están los profesores? ¿Acaso son ciegos? Pero ahora recuerdo sabias palabras de mis mayores, ‘no hay peor ciego que aquel que no quiere ver’.
Realmente lo veo así. Un profesor que esta presenciando este tipo de violación a las normas de una institución es un ciego voluntario. Aunque nobleza obliga, debo resaltar el actuar de un profesor que durante este último periodo de parciales noto lo que sucedía y no solo puso en evidencia a esa persona – de una forma muy sutil – sino que hizo algo al respecto (obviamente le quito todo). Aclaro que fue el mejor momento del parcial, al menos para mí.
Yo puedo entender la situación límite en el cual se puede incurrir en el caso de no poseer recuperatorio en una materia anual, pero no me entra en la cabeza que una persona haga del copiarse no solo un arte sino un estilo de pasar las materias, en síntesis una forma de vida.
De esas personas solo puedo decir que me dan lastima, el mismo sistema de esta universidad va a encargarse de ellas… (Comprobé que no pasan ningún final. Es más complicado copiarse en la capilla, lo que no quita que lo hagan igual).

No se ustedes pero personalmente elegí una universidad privada por el tipo de enseñanza más personalizada que ofrece. Ahora yo pretendo que esa enseñanza personalizada me incluya, y no que le profesor se disponga a darle clase a unos pocos alumnos con los cuales tiene buena relación. Yo puedo entender que un profesor tenga más afinidad con determinados alumnos, no me parece mal; pero si pretende darle clase solo a esas 10 personas que vayan a tomar un café y hagan de la clase una conversación – un profesor nos explico que las charlas son inconducentes… - amena y con un café de por medio, y nos deja - a todos los que no somos bienvenidos - dormir.

El discursito de ‘nosotros somos los encargados de fórmalos como excelentes profesionales’ me lo se de memoria, y desde ya les aclaro no es una buena técnica de marketing. Quizás es la forma en la que lo dicen, pero realmente no funciona. Pero ese es un tema al margen.

En esta universidad hay dos reglas de oro – o ‘Golden Rules’ – la primera es hacer lobby. Seamos honestos si no haces lobby no sobrevivís. No es cualquier clase de lobby, es uno muy específico y particular. No se trata de llevarse bien con uno o dos profesores, sino con los profesores indicados. Son dos o tres, quizás cuatro, no más. Son de esos que ‘manejan’ todo. El lobby te abre muchas puertas, no lo niego. Pero les advierto que tienen que hacerlo desde el primer día de otra forma es inútil, los profesores se pueden hacer los boludos pero créanme no lo son. Al respecto solo les puedo decir que en lo personal, va en contra de mi hacer lobby y no lo hice por esa razón; eso y porque me tomo un par de años darme cuenta que esa era la forma de aprobar.
La segunda es no poseer vida social. Les recomiendo a los directivos o a la gente de admisiones que en la solicitud de ingreso además de preguntar la religión y si es practicante – algo completamente irrelevante académicamente – que indaguen acerca de la cantidad de amigos que poseemos o los hábitos sociales. Y también les aconsejo que en el folleto pongan como requisito “tener poca vida social, o en su defecto estar dispuesto a dejarla de lado por el amor al derecho”. De esta forma más de uno no ingresaría, y se ahorrarían varios desertores o parásitos.

Comprendo que voy/iba (cambia el tiempo dependiendo del momento en el que lo lean) a un universidad con tendencia religiosa… bastante religiosa, ergo conservadora, arcaica en algunas ideas, etc. Es por esta razón que en la mayoría de las aulas hay figuras religiosas (crucifijos, imágenes, cuadros, etc.). Me gustaría aclararles que tanto Dios, como la Virgen María y Jesucristo son mucho mas que ‘figuritas decorativas’. Personalmente creo que se olvidaron de eso acá… eso o la omnipresencia de Dios no tiene entrada en este ‘mercado cerrado’ al que concurrimos de 8 a 13 hs de Lunes a Viernes.

Quiero aclarar que no obstante mi pensamiento sobre la universidad pase muy buenos momentos. Me reí muchísimo con mis amigas, a las que hoy me duele mucho dejar. Tuve conversaciones muy productivas con algunos profesores, a quienes les agradezco sus consejos, su ayuda y por sobre todas las cosas el haberme escuchado. No todo lo que me llevo es malo. Siempre hay cosas rescatables. (Aunque creo que no es casualidad que muchos de esos profesores ya no formen parte de la universidad). Claro que una pequeña mancha negra, oscurece todo lo blanco que puede llegar a haber.

No voy a explayarme más con las injusticias que se ven diariamente acá. Solo voy a concluir con: Esta universidad es igual a todas las demás, pasa lo mismo que todas las universidades. La diferencia radica en que en otras quizás no se entera nadie por la cantidad de alumnos, desgraciadamente en la nuestra las noticias de que alguien se copio, o que le subieron la nota de un parcial corren muy rápido. A eso hay solo una frase que puedo agregar: “pueblo chico infierno grande”.
Solo les dejo un par de consejos. Primero aprendan a copiarse o háganse amigos de aquellos que estudian y los van a dejar mirar de su parcial. Segundo esencial que se lleven bien con los profesores, no importa lo que realmente piensen de ellos, siempre con una gran sonrisa saludando a todos. Tercero acá la verdad no sirve, si van con la verdad van a salir perdiendo a la larga, siempre oculten o benefíciense con los ‘olvidos’ o ‘la falta de atención’ que el profesor puede llegar a tener.
Les deseo la mejor de las suertes a quienes se quedan en esta cárcel con fachada de universidad de derecho.



Una humilde escritora.

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